El proyecto europeo DIGITbrain acaba de comenzar con el objetivo de brindar a las pymes europeas un fácil acceso a la tecnología de gemelos digitales, que consiste en una réplica virtual de sus productos, servicios y procesos para optimizar su gestión. PNO Innovation, Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA), el Instituto Tecnológico de Aragón (ITAINNOVA), ENIDE Solutions e Inyecciones Montañana son las entidades españolas participantes de un total de 36 socios europeos. Financiado por el programa Horizonte 2020 de la Unión Europea (UE), el proyecto DIGITbrain (GA 952071) tiene una duración de 3,5 años y un presupuesto de más de 9 millones de euros.

DIGITbrain potenciará la red europea de centros de innovación digital para implementar un modelo de negocio inteligente llamado fabricación como servicio (MaaS, por sus siglas en inglés), que facilitará la producción rentable, distribuida y localizada de productos especializados. Además, el proyecto prevé abrir dos convocatorias dirigidas a pymes TIC y manufactureras, con el objetivo de mostrar y validar los resultados obtenidos. De esta forma, DIGITbrain proporcionará acceso a gemelos digitales que aporten agilidad e innovación a las pymes.

Un gemelo digital es la representación virtual de un producto, sistema o proceso que simula sus atributos físicos en tiempo real. Al recopilar datos de su contraparte física, los fabricantes pueden optimizar el proceso de fabricación y hacer predicciones de los fallos de la máquina o necesidades de mantenimiento.

El proyecto DIGITbrain irá un paso más allá al desarrollar el ‘Cerebro del producto digital’, que almacenará datos durante todo el ciclo de vida de una línea de producción o una máquina. Al recopilar todos estos datos, será posible personalizar y configurar máquinas o activos de producción para tareas de fabricación muy específicas. Esto facilitará el desarrollo de un nuevo modelo de fabricación, llamado fabricación como servicio, que permitirá la producción bajo pedido de productos mucho más especializados, incluso en cantidades más pequeñas y de una forma económicamente rentable.

La industria manufacturera internacional supone un entorno desafiante, ya que los clientes actuales tienen nuevos requisitos respecto a la personalización y la interoperabilidad de nuevos productos y tecnologías. Al mismo tiempo, las regulaciones se están volviendo más estrictas; el medio ambiente exige más protección y menos contaminación; y el envejecimiento de la fuerza laboral pone en peligro los conocimientos colectivos. Mantener el ritmo de la competencia requiere de inversiones considerables en las últimas tecnologías digitales y equipos avanzados, lo cual es particularmente desafiante para las pymes que, a menudo, no pueden permitirse tales inversiones o no pueden saber si resultarán útiles.